Vivimos un momento en el que ha cambiado la vida con respecto a tal y como la conocíamos hasta hace algunos años. Podríamos decir que ahora las distancias se han reducido y que la información se ha multiplicado de una manera gigantesca en los últimos años, principalmente gracias al desarrollo de una herramienta de la importancia de Internet, que ha dado un vuelco espectacular no solo a nuestra manera de disfrutar de nuestro tiempo de ocio, sino también a la hora de trabajar.
La sociedad en la que nos encontramos es una sociedad globalizada e interconectada y eso genera una nueva serie de necesidades o, por el contrario, una potenciación de las necesidades que ya eran vitales años atrás. Precisamente en este último campo se encuentra el asunto del que os vamos a hablar de aquí al final del artículo: los idiomas. Y es que esta es la herramienta imprescindible para garantizar que las relaciones comerciales entre empresas de países que no tienen nada que ver entre sí pero que se necesitan funcionan correctamente. El conocimiento de idiomas, que siempre ha sido considerado como una necesidad, ahora es una obligación que no puede pasar desapercibida en ningún caso.
Un artículo publicado en la página web del diario La Voz del Tajo informaba de que son muchas las razones para apostar por el bilingüismo. En este texto se hace referencia a una cuestión a la que ya nos hemos acostumbrado, que es a calificar al inglés como el principal segundo idioma que se estudia en el interior de nuestras fronteras. No obstante, también se menciona que el francés también ha sido una de las lenguas que ha tenido bastante repercusión en España principalmente a causa de la cercanía geográfica y cultural de nuestro país con el galo.
Pero sí que es cierto que, en un mundo como el actual, es imprescindible el conocimiento del inglés para sacar provecho de las relaciones comerciales que nuestro país ha elaborado. Precisamente de esas relaciones habla una noticia que hemos extraído del blog de Banc Sabadell, que asegura que países de nuestro entorno como lo son Francia, Alemania, Portugal, Italia o el Reino Unido constituyen nuestras principales vías comerciales. Teniendo en cuenta la dificultad que entraña el conocimiento de los cinco idiomas que se hablan en estos cinco países, el inglés es la manera que encontramos de poder comunicarnos con todo el mundo por igual.
Mantener la red comercial de un país en el resto del mundo no es una tarea ni mucho menos fácil. Es algo que hemos comprobado con el paso de los años y que empieza en el conocimiento de un idioma que tiene que ser conocido por ambas partes y que, en muchas ocasiones, no suele ser el nativo de ninguno de los dos lugares. Los profesionales de una entidad como La Vila Traducciones, que suelen conocer bastante bien estos procesos, nos han comentado que las empresas cada vez necesitan más servicios en lo que tiene que ver con la materia idiomática y que ésta es clave a la hora de desarrollar una buena red de clientes por todo el mundo.
Una necesidad que sigue creciendo
La necesidad en este tipo de supuestos sigue creciendo a medida que pasan los años. Y es que hay una serie de países en el mundo que vienen creciendo de una manera bastante interesante y que están provocando el nacimiento de un nuevo orden mundial. Hablamos, por ejemplo, de los dragones asiáticos. No solo nos referimos a China, Japón o Corea del Sur: también lo hacemos de países como Vietnam, Taiwán, Tailandia, Laos…
Esto está haciendo que haya muchas empresas que, en pos de establecer relaciones comerciales en esta zona del mundo, estén deseosas de conocer los idiomas de estos países o, en su defecto, disponer de alguna persona o entidad que le pueda prestar ese servicio. Y es que ser capaz de sacar rédito a todas las posibilidades que esos países generan para nuestras empresas es fundamental en un periodo como en el que nos estamos moviendo. Desde luego, puede ser la diferencia entre que nuestra economía crezca o que se mantenga en un estado decadente, como ocurre en la actualidad.
Está claro que el futuro más inmediato genera una nueva serie de necesidades a las que las empresas tienen que dar una respuesta. No nos cabe la menor duda de que ya son muchas las personas que están trabajando con el firme objetivo de conseguir los avances más importantes en materia comercial. Para ello, el conocimiento de los idiomas es fundamental. Podríamos decir que es la base de cualquier éxito que se precie. Y, desde luego, conviene que no la desperdiciemos. Si somos capaces de dominar el idioma, podremos convertir en mucho más rentable a nuestra actividad. Y eso merece mucho la pena.