Si piensas que no necesitas carné de carretilla elevadora, te interesa este artículo

El comercio electrónico ha sido un potenciador extremadamente importante del sector de la logística. Dicho sector se ha convertido en un sector clave de la economía, pues permite que las empresas traspasen las fronteras para poder adquirir mayor volumen de mercado.

Si bien la logística ha sido un sector orientado a la consecución de grandes transportes internacionales, en la actualidad se está orientando mayormente a los transportes dentro de un país, pues las compras online lo han cambiado todo. La aparición de grandes empresas como Amazon o eBay, así como la presencia online de muchas otras empresas, ha permitido que el sector de la logística coja una nueva dimensión.

Una de las profesiones que más ha visto reflejada el aumento de la demanda de servicios logísticos es el de carretillero elevador. Esta es una profesión de la que vamos a hablar en el día de hoy, pues tenemos que tener en cuenta que cada vez se mueven más mercancías, y para poder llegar a todos sitios, las carretillas elevadoras son imprescindibles.

Pero no ha sido una profesión que haya estado siempre regulada, pues durante muchos años la profesión de carretillero elevador no requería de formación alguna. Todo aquel que pudiera saber llevar una carretilla de este estilo podía hacer el trabajo, pero en las empresas profesionales surgió la necesidad de exigir una acreditación para evitar accidentes no deseados o negligencias que pusieran en peligro a la empresa y sus integrantes.

Pues bien, tal y como vamos a ver en la siguiente sección, la profesión de carretillero ha ascendido a la posición que le corresponde, siendo demandada hasta puntos que no podemos imaginarnos. Al acabar este artículo serás capaz de conocer los requisitos necesarios para ser un conductor de carretillas eléctricas profesional.

La profesionalización llega a todos los puestos de trabajo

La profesión de carretillero es una de las más demandadas en el sector logístico, pues es un profesional indispensable para poder transportar, distribuir y organizar las mercancías que se ubican en un almacén, con el uso de una carretilla elevadora, que no es ningún juguete.

Por tanto, el carretillero es un trabajador profesional que conduce una carretilla industrial, que puede ser eléctrica, y que realiza el desplazamiento y las maniobras de elevación y apilamiento de mercancías pesadas en almacenes, fábricas y otros establecimientos. El sueldo medio suele rondar los quince mil euros anuales, aunque el mismo puede variar dependiendo de la empresa.

A pesar de lo que se pueda pensar, existen muchos tipos de carretillas industriales, habiendo de tipo retráctil, frontal, bilateral, trilateral… etc. El uso de una u otra depende de las características de la nave o almacén, así como del tipo de mercancía que se vaya a manejar.

Las principales funciones de un carretillero, que recordemos son claves para la logística de una empresa, son: recepción y colocación de mercancías en tarimas o palés, carga y descarga de mercancías, transporte de mercancías de un punto al otro del almacén, y en ocasiones tareas administrativas como revisión de albaranes y facturas.

Lo interesante de esta profesión es que cada vez es más y más demandada, pues con el crecimiento del comercio electrónico existe una rotación de stocks que es cada vez mayor en los almacenes, debido al aumento de la demanda de mercancías. Y esto exige que los profesionales puedan trasladarlas de un punto a otro del almacén con rapidez.

Si tu pregunta es, ¿qué necesito para ser carretillero?, debes de sacarte un certifiado de conducción de carretillas, pues no existe un carné oficial. Pero existen diferentes empresas formadoras que ofrecen cursos de 8 a 20 horas que incluyen formación teórica y práctica, en la que se procede a la conducción de maquinaria real.

A la hora de elegir qué tipo de carretilla elevadora es necesaria para un trabajo o para otro, es necesario acudir a empresas especializadas en el sector de las carretillas elevadoras.  Tomi Maquinaria, nos ha asegurado que cada sector debería recurrir a un modelo concreto, pues las necesidades no son las mismas, ni los resultados tampoco. No obstante, para los que no tenemos esos conocimientos especializados, lo mejor es recurrir a profesionales del sector.