Yo no había hablado del famoso certificado energético hasta que hace un mes me decidí a alquilar un piso que tenían mis padres. Con el fallecimiento de mi padre, decidimos ponerlo en alquiler, y cuando fuimos a la inmobiliaria, me lo exigieron. Así que me puse en contacto con la empresa Certificados Energéticos Barcelona para realizar los trámites. Algo que puede pensarse que es complicado, pero que si lo pones en buenos profesionales, ellos son los que lo te gestionan.
Si estás perdido como yo, lo primero que tienes que saber es que consiste esto:
Es el documento resultante del proceso de certificación energética de un inmueble. Recoge información sobre elementos constructivos del inmueble y sus instalaciones obteniendo así valores sobre demanda y consumo energético de un inmueble. Con estos valores otorga al inmueble una calificación energética en función de las emisiones de dióxido de carbono y el consumo de energía. Un aspecto que desde el pasado año, todos los Gobiernos de las Comunidades Autónomas te lo exigen, por ejemplo, el certificado energético en Barcelona entró en vigor el pasado 2013, un año después, al precio ya existente hubo que sumar al precio las tasas de la Generalitat.
Una vez realizada la inspección del inmueble, y acabado el certificado energético, se emite la etiqueta energética, que es el distintivo que recoge la calificación obtenida en el certificado energético. Y que señala el nivel de calificación de eficiencia energética obtenida por el edificio o unidad del edificio. Con un código de color clasifica los inmuebles según una escala energética que va desde la A (inmueble más eficiente) a la G (inmueble menos eficiente). Con estas explicaciones, que me dieron en esta empresa de certificados energéticos de Barcelona me quedó claro.
La otra gran pregunta es saber quiénes lo tienen que pasar. Pues bien, la obligación de obtenerlo es por parte del propietario o promotor del inmueble, que se pongan en venta o alquiler y que no disponga ya de su certificado energético en vigor es el responsable de obtener el certificado de eficiencia energética. Este debe adjuntarse a toda oferta, promoción y publicidad dirgida a venta o arrendamiento de un inmueble. Por eso, la inmobiliaria me lo pidió cuando fui a alquilarlo. Tienes que huir de las casas que no lo tengan.
Esta certificación energética en Barcelona la tienen que pasar todos los edificios de nueva construcción, además de todos los edificios o partes de edificios que estén en venta o alquiler. Y por último, edificios o partes de edificios en los que la autoridad pública ocupe una superficie útil total de 250 m2 y que sean frecuentados habitualmente por el público. Hay alguna excepción pero lo mejor es que consultes la página web de Certificados Energéticos Barcelona porque podrás enterarte de todo.
Aunque sea un marrón, estas cosas hay que hacerlas y cumplir con las leyes, si no quieres tener un susto posterior, ya que no hacer esto supone una multa. Cuando por poco más de 70 euros puedes tenerlo y ganar en tranquilidad. El que avisa no es traidor.