Garantizando la seguridad de quien trabaja en altura

Trabajar en alturas implica tener una serie de riesgos que no conceden ni tan siquiera un pequeño margen de error. El más mínimo descuido, la más mínima imprecisión, puede ser sinónimo de desgracia. Una desgracia que aparece en forma de muerte y que puede evitarse si se cuenta con los sistemas de protección más avanzados y adecuados para la materia.

El de la construcción es el sector al que más falta hace este tipo de elementos. Aunque nos encontremos en el siglo XXI, rodeados de avances tecnológicos y con una sociedad digitalizada e informatizada, sigue muriendo gente en las obras como consecuencia de negligencias individuales o de su propia empresa. Así las cosas, durante el año 2016, 607 trabajadores perdieron la vida mientras desarrollaban su actividad.

Resulta difícil para todos los actores implicados tener que cargar con la muerte de un trabajador. Por un lado, el daño humano que sufre la familia y los amigos del fallecido es muy grande. Nada lo puede cambiar ni suavizar. Por otro lado, la empresa (ya sea responsable o no del suceso) se da a conocer a causa de un suceso negativo, desolador, lo cual puede dejar una serie de inconvenientes en el camino muy difíciles de superar.

No todas las entidades logran superar la nefasta imagen que deja la muerte de uno de sus trabajadores, por lo tanto la solución consiste en prevenir antes que curar. Disponer de los mejores sistemas para trabajar en altura es hoy más posible que nunca gracias al trabajo que determinadas entidades realizan para configurar líneas de vida, arneses y todo tipo de sistemas destinados a mantener al trabajador perfectamente sujeto mientras desempeña su actividad en altura.

Una de esas entidades es Work Protec. En la actualidad se ha convertido en un excelente exponente para materias como los que se están tratando en el presente artículo. Su principal misión consiste en mantener el máximo número de vidas a salvo y la verdad es que sus sistemas son los que permiten garantizar una mayor seguridad para todos.

Los productos ofrecidos por Work Protec cuentan con la ventaja de contar con las mejores homologaciones. Los profesionales de la compañía se encargan de todo lo que tiene que ver con la instalación de los sistemas, incluyendo una evaluación “in situ” de todos los posibles riesgos. Los diseños de las llenas de vida y demás productos se adaptan a cualquier tipo de infraestructura y por eso las empresas constructoras suelen ser las más beneficiadas del trabajo de una compañía como esta.

Mantenimiento y formación, dos pilares fundamentales en el trabajo diario

Confiar en una entidad como Work Protec cuenta con otra serie de ventajas que no desmerecen en nada a las anteriores. Por un lado, ofrece la posibilidad de que la relación entre sí misma y el cliente no acabe en el momento de la compraventa al dar la opción de revisar el mantenimiento de los sistemas. Los materiales van perdiendo capacidades con el paso del tiempo y desde una entidad que se encargue de la venta de sistemas de seguridad en altura no debe faltar un servicio como tal.

Por otro lado, desde la empresa se ofrece un servicio de formación para el trabajo en altura. Algo fundamental para todos aquellos que, siendo empleados de un sector como el de la construcción, no tienen la experiencia suficiente como para saber al cien por cien qué pautas seguir para hacer que el trabajo en altura sea seguro y también eficiente.

Se ha hecho referencia a que es mejor la prevención que la curación en una materia como esta. Sin embargo, no es menos cierto que nada de esto tiene sentido si la palabra “compromiso” no gobierna la totalidad de la operación. Solo con ella es posible acabar con esas trágicas muertes que en numerosas ocasiones abren los telediarios. La prevención de riesgos laborales es, una vez más, el camino a seguir.