Armarios empotrados: una garantía para las casas rurales

Uno de los elementos más importantes en una vivienda es el armario. Sin lugar a dudas, un mueble como tal condiciona nuestra vida y comodidad en el hogar: si disponemos de uno amplio, tenemos la oportunidad de guardar infinidad de prendas en él, prendas que no pondremos en cualquier lugar. Por otro lado, si además de amplio ocupa un espacio limitado, tendremos una mayor libertad de movimientos en nuestro domicilio.

¿Cómo hacer que un armario sea amplio pero que no ocupe demasiado espacio? La respuesta se encuentra en los llamados armarios empotrados, que cada día son más habituales y que solo suponen ventajas. Adquirir una de estas joyas se está convirtiendo en una verdadera necesidad porque tiene una influencia directa en nuestra calidad de vida.

Desde hace un par de años dirijo una compañía inmobiliaria dedicada al alquiler de casas rurales en diferentes puntos de la Sierra de Madrid. Este es un negocio bastante rentable puesto que un sinfín de personas en nuestro país suele escapar durante un fin de semana a un entorno como este para perder el estrés y olvidarse de todos los problemas ocasionados a lo largo de la semana, tal y como nos confirman desde el portal Ruralzoom, especialistas en casas rurales en Cantabria, Cataluña, Madrid y resto de España.

No obstante, hay una competencia feroz en el sector con muchos particulares que deciden alquilar sus casas rurales propias a un precio inferior al que lo hacemos nosotros. Obligados a pelear contra esos precios, en la inmobiliaria que dirijo decidimos desde un principio apostar por la calidad y la confortabilidad de nuestros visitantes. Por eso una de nuestras máximas era la instalación de armarios empotrados en las casas. De esta manera, ahorraríamos espacio sin necesidad alguna de reducir las posibilidades de almacenar una gran cantidad de ropa.

Nos interesamos entonces en diferentes entidades dedicadas a la instalación de este tipo de armarios. Tras un primer balance, consideramos que Sidón Armarios, una empresa de Arganda del Rey, era la más indicada. Poseía una buena experiencia en el sector, los armarios que proporcionaba eran espaciosos y de calidad y sus precios, no demasiado altos. No íbamos a encontrar nada mejor. Y nos sentíamos satisfechos. Por eso, decidimos darles la oportunidad.

Necesitábamos armarios empotrados para todas nuestras casas rurales. Y los necesitábamos en el menor tiempo posible. El verano se acercaba y una buena cantidad de turistas se acercarían a la Sierra de Madrid para descansar. Desde Sidón Armarios nos tranquilizaron al decirnos que en apenas unos días todos los armarios estarían perfectamente montados y dispuestos. Y la verdad es que así fue. Sus profesionales se volcaron con nuestra causa y las casas rurales estuvieron listas para ser alquiladas en apenas un par de semanas.

Los visitantes, encantados

Desde el mismo momento en que comunicábamos a los clientes que nuestras casas rurales contaban con armarios empotrados se dispararon las solicitudes de alquiler. De hecho, durante los dos veranos que ha existido la empresa no ha habido un solo día en el que las casas estuvieran libres, lo que ha maximizado los beneficios de la empresa y le ha permitido seguir subsistiendo sin problema alguno.

Lo más importante para nosotros, al margen de todo ello, es que nuestros visitantes se sienten cómodos en las instalaciones que les proporcionamos. Tener armarios empotrados les permite guardar su ropa de la misma manera en la que lo harían con otros armarios pero sin que éstos les copen un espacio vital. Eso es imprescindible y todo el mundo lo agradece. No es para menos.

Lo realmente positivo para el negocio es que, gracias a apuestas como estos armarios, las casas rurales suelen estar ocupadas durante buena parte del año. Todo el mundo encuentra en el nuestro un servicio de calidad y ese es el motivo que les hace apostar por nosotros.

Aunque es cierto que no sabemos cómo se desarrollará el negocio en el futuro, estamos bastante tranquilos. Tenemos un servicio de la primera calidad y sabemos que, si lo seguimos manteniendo, no nos faltarán el trabajo ni el dinero.